La estacionalidad es algo real. Bitcoin ha seguido la estacionalidad durante 15 años; los mercados de valores, más de 100 años. Se repite y no se puede arbitrar porque cosas como el año fiscal, el calendario escolar y los ciclos climáticos / agrícolas son fijos. Algunos de estos ciclos de comportamiento humano afectan directa e indirectamente a los mercados financieros, lo que da lugar a patrones repetibles que pueden explotarse, pero no eliminarse.